Mi nueva no vida

Tema: Re: Mi nueva no vida Lun Ago 11, 2008 11:58 pm

Peque a mi me suena cariñoso... que no se enfade. A mi un tio así de bueno me puede llamar con casi cualquier diminutivo... mientras me llame.
Tienes razón en una cosa es demasiado corto... más, más.
Nos leemos

Netzara

Tema: Re: Mi nueva no vida Mar Ago 12, 2008 12:19 am

Estoy de acuerdo con Netzara: peque suena cariñoso y... quiero leer más, sino es ucha molestia Rolling Eyes

Tema: Re: Mi nueva no vida Mar Ago 12, 2008 2:28 am

Esta muy bien n_n
Bueno lo de peque depende de como lo digas porque a mi me lo dicen para cachondearse y por muy guapo que sea yo le mando a la mierda XD

Tema: Re: Mi nueva no vida Mar Ago 12, 2008 3:00 pm

Genial.

Aunque estoy con mis compis un poco corto.

Pero no siempre se pueden escribir largos.

estos al final se lian.

Amores reñidos son los mas queridos.

Continua en cuanto puedas.

Tema: Re: Mi nueva no vida Mar Ago 12, 2008 5:24 pm

Muchas gracias a las cuatro por comentar tan deprisa! ^^

Hoy os dejo un poco más =P

Lo de peque puede ser un mote cariñoso, pero ahora mismo a Vic le molesta mucho. Quizá tenga relación con la rabia repentina de la otra vez Rolling Eyes

jaja

CAPITULO 3

-¿Qué te ha dicho? ¿Cómo lo has conocido? ¿Has hablado mucho con él?
Rocsan no paraba de hacerme preguntas a lo loco y sin cuidar su tono de voz, la mesa de él y la nuestra no es que estuvieran muy separadas.
-Tranquila. –le respondí bajando la voz. – Tan solo le he preguntado como se llegaba a la cafetería y me ha acompañado.
Las tres abrieron la boca desmesuradamente, atónitas.
-¡Erik Joks le ha hablado! –la voz de Mélody salió en un susurro pero cargada de emoción. -¿es simpático?
-La verdad... es algo molesto.-Todas las sonrisas se apagaron a la vez.- aunque no he hablado casi con él.
-Pero volverás a hacerlo ¿verdad?-la sonrisa de Rocsan se hizo más amplia.
Esa pregunta me dejó transpuesta. Se notaba a cuatro metros la atracción que sentía Rocsan por Erik, pero que me involucrara a mi de por medio...
-Va a tus dos optativas. –añadió para aclararse. –cursa el bachiller científico, pero hizo unos cuantos cambios y coincide contigo... podrías hablarle de mí.
“¡Que chica más directa!” pensé en ese momento, pero no me atreví a decir nada.
-Bueno...-me pensé el no volver a hablar con él si tan solo pretendía degradarme, pero luego recordé lo perfecto que era y lo bien que se había portado conmigo a pesar de todo. –pero no hablaré mucho con él.
-¿No te gusta? –la cara de Melisa era como un mapa.
-Veras... – aún no le había contado, ni siquiera a ella que tenía novio. – estoy saliendo con un chico desde hará... unos siete meses.
Las otras dos chicas no mostraron ningún síntoma pero a Melisa pareció impactarle, por lo que tuve que contarle toda la historia y decirle que él no estaba aquí, si no en mi pueblo.

Cuando llegué a casa estaba agotada. El primer día había sido aburridísimo y la falta de sueño ayudaba a que lo fuera más.
Saqué todo lo que llevaba en mi cartera y me puse los libros del día siguiente. Ni siquiera bajé a cenar cuando mi madre me llamó, simplemente descansé tumbada en mi cama hasta que mis párpados se cerraron.

-¡Vic!-la voz ajetreada de mi madre me alarmó. -¡Te has dormido! ¡Vas a llegar tarde!
Abrí los ojos de par en par. El instituto no quedaba muy lejos de mi casa, pero tendría que correr mucho para llegar a tiempo a la primera clase.
Me levanté corriendo, mareada. Había estado toda la noche soñando con Lucas y cuanto le extrañaba. “Hoy le llamo” pensé para mi misma. Dos meses era mucho tiempo, y empezaba a estar preocupada por nuestra relación a distancia, notaba que cada vez me olvidaba más de él, como si ya no existiera en mi vida. La imagen de Erik pasó por mi mente mientras me ponía la falda a toda velocidad, me asombré al recordar sus ojos grises. Me encantaban. Lástima que la primera conversación no acabase bien, podría ser un buen compañero si es que iba conmigo a mis optativas, aunque ayer no lo vi en ninguna de ellas.
Ni siquiera me miré al espejo. Me puse todo lo rápido posible una camisa blanca, la chaqueta gris del uniforme, los horribles calcetines por las rodillas y los zapatos negros.
Bajé corriendo al piso de abajo donde un delicioso desayuno me esperaba.
-No tengo tiempo de comer nada. –le dije a mi madre mientras cogía una goma del pelo y me lo peinaba con las manos haciéndome una coleta.
-Anoche no cenaste nada, come algo o luego te encontrarás mal.
Cogí una manzana del frutero por no escucharla, me la comería de camino al instituto.
Torpe de mí, me había dejado la cartera arriba por lo que tuve que volver a subir y bajar. Esto me quitó tiempo, sin duda, porque al final llegué cuando el timbre había sonado hacía cinco minutos.
Corrí los pasillos tan rápido como pude, hasta llegar a mi aula. La clase ya había comenzado.
-¡Señorita Adelamez! –la señora Delam me clavó la mirada. -¿Ya ha olvidado las reglas de ayer? –no supe que contestar, verdaderamente no las había olvidado, porque ni siquiera me había enterado de ellas. –Hay un horario, y quien legue tarde a mi clase ya no puede pasar. Así que valla con el profesor de guardia hasta que se haga la hora de la siguiente clase.
Mi resoplido se escuchó por toda la clase, y mi portazo al salir también.
Fruncí el ceño mientras iba con grandes zancadas hacia la conserjería. Ahora tendría que quedarme toda una hora con un profesor de guardia haciendo el imbécil.
Y para colmo, me había pasado un pasillo. Iba a rectificar y volver hacia atrás cuando el cartel de biblioteca apareció en mi camino.
Pensé en ignorarlo, pero prefería mil veces estar en la biblioteca con mis cosas que haciendo lo que un profesor me mandara por llegar cinco minutos tarde a una clase.

Era muy grande, la más grande que había visto en mi vida. Tiras y tiras de armarios llenos de libros se extendían delante de mí con sus respectivos carteles, indicando la categoría de cada libro.
A mi derecha una mujer dentro de un gran mostrador con un ordenador ojeaba una revista del corazón sin prestar la menor atención a su exterior.
Me adentré por el pasillo de poesía. Me apetecía leer un buen libro que hablara de amor.
Al final me decanté por un libro llamado Fragmentos, que trataba sobre un amor homosexual imposible. Estaba harta de leer siempre lo mismo, esta vez escogí algo fuera de lo común.
Me senté en una de las tropecientas mesas (todas vacías) que habían allí y me puse a ello.
A los diez minutos de mi lectura, alguien me dio unos pequeños golpecitos en el hombro llamando mi atención y cortándome el hilo de mi lectura.

Ahora no direis que es cortito ¿no? XD

Tema: Re: Mi nueva no vida Mar Ago 12, 2008 5:42 pm

Lo diremos, porque cuando algo nos entretiene y nos gusta siempre se hace corto Wink

Sigue pronto, por fa, que ahora nos has dejado a Vic con la lectura cortada y a mi con la respiración.

Tema: Re: Mi nueva no vida Miér Ago 13, 2008 12:45 am

No, cortito no... pero tenías que dajarlo tan interesante?
Ahora no nos abandones mucho tiempo así, con la intriga.
Besitos

Netzara

Tema: Re: Mi nueva no vida Miér Ago 13, 2008 11:42 pm

Genial el capi.

Te has quedado en lo mejor.

¡Sera Erik! quien entra en la bliblioteca.

O sera el profe plasta de guardia.

JOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Y ya me piro de vaca y me voy sin enterarme.

Os echare de menos.

Besos.

Tema: Re: Mi nueva no vida Vie Ago 15, 2008 6:45 pm

Esta muy interesante continuala n_n

Tema: Re: Mi nueva no vida Lun Ago 18, 2008 5:41 pm

Buenassss =D siento la tardanza Embarassed

pero no he podido pasarme hasta hoy =S

-Hola peque. – nada más escuchar ese mote supe quien era sin necesidad de darme la vuelta. Mi sangre volvió a hervir. -¿Te importaría dejarme ese libro?
-¿Por qué debería hacerlo? – su rostro era incluso más hermoso que el de ayer a pesar de que sus ojos se hubieran oscurecido un tanto, pero no me dejé llevar por ello.
-Lo necesito para mi trabajo.
-Ahora lo tengo yo. –dije levantándome. Tenía intención de irme a otra mesa para que me dejara en paz. – Tendrás que esperar a que lo termine.
-Eres muy cabezota, peque. –su sonrisa picarona volvió a aparecer, y tuve que morderme la lengua para no empezar a soltarle de todo.
-No me llames así, lo odio.
-¿Por qué? Eres bajita y debes tener unos meses menos que yo, con lo cual eres más pequeña que yo en todos los sentidos. –me había vuelto a agarrar del brazo y otra sensación de alarma parecida a la de ayer me recorrió, era sorprendente la fuerza que tenía y lo frío que estaba. –Lo siento.-dijo soltándome del brazo al recordar lo ocurrido el anterior día.
En cuanto me soltó, noté que mi cuerpo volvía a su estado normal, excepto donde él me había tocado. Estaba totalmente helado.
-¿No tienes frío?-le pregunté extrañada.
-No. –su tono ahora era indiferente y su sonrisa se había convertido en una mueca. -¿Me lo vas a dejar o no?
Me sorprendió el tono tan brusco que usó conmigo, definitivamente este chico me sacaba de quicio.
-Pues mira por donde no. – le di la espalda y me dirigí entre los pasillos a la bibliotecaria, que dejó con mal humor su revista y se puso a atenderme.
Después de adquirir el libro por una semana y media, me sentí verdaderamente poderosa, ahora tendría que apañárselas como pudiera para conseguir otro ejemplar. Lo tenía bien merecido, por tratarme así ¡¿Qué se creía?!
Comprobé el reloj nada más salir de allí, aun faltaban veinte minutos para la siguiente clase, así que fui al aseo a llamar a mi novio. Por lo menos ahí no me escucharía nadie.

Marqué deprisa el número, estaba nerviosa.
Pip...pip...pip... comunicaba.
-Mierda.-susurré mientras volvía a marcar, esta vez contestó.
-¿Vic? –su voz grave me tranquilizó los ánimos y me llenó los ojos de lágrimas.
-Te hecho de menos.-le contesté por saludo mientras me secaba con el papel higiénico.
-Y yo a ti.-su voz sonó dulce.-Hoy no he ido a clase, ¿te parece bien que valla para allá a hacerte una visita?
Mi corazón se hinchó de júbilo mientras una sonrisa tonta iba ocupando mi rostro.
-Eso sería genial.
-Entonces estaré ahí esta misma tarde.
-Ven a buscarme a casa, te enseñaré un poco la ciudad.
-Como quieras. –su voz se apagó un poco.
-¿No quieres que te la enseñe?
-Prefiero estar contigo, a solas.
Enseguida capté su mensaje, y yo sola me ruboricé. Ya había tenido varios encuentros con él, pero aun así se me hacia raro hablar sobre aquel tema.
-Mis padres saldrán unas dos horas, podemos aprovechar.
-De acuerdo.-su voz había vuelto a recuperar el entusiasmo perdido. –Bueno, voy a coger ya el coche, nos vemos luego. Te quiero.
-Y yo. – colgué al instante. No me quedaba casi saldo, y cada segundo era dinero perdido.

Salí del bater eufórica y feliz y así pasé el resto del día, hasta que llegó (después del almuerzo) la clase de latín.
Allí estaba Erik, tan contento como yo lo estaba, en mi sitio.
Al llegar junto a él, carraspeé para hacerme notar, pero no me hizo ni caso.
-Estas en mi sitio.-le informé de mala gana.
Sus ojos grises se clavaron en los míos maliciosamente.
-Era tu sitio.-me corrigió con esa sonrisa picara.
Suspiré, no me apetecía discutir y fastidiarme el día, por lo que me senté en una fila más alante. La señorita Dolç apareció enseguida, perfecta, al igual que ayer. El parecido con Erik era asombroso por dos razones, su increíble belleza y por su palidez en esta ciudad tan soleada. Aunque también tenían sus diferencias, el color de pelo y de ojos, la forma de la cara...
-Hoy repasaremos un poco los verbos más básicos y me haréis una descripción de algún compañero de clase. –su voz se apagó en mi mente. Perfecto, ¿ahora a quien describía? Estaba claro que a Erik no, ni yo le aguantaba a él, ni él me aguantaba a mí. Por lo que me decanté en describir a una chica de pelo moreno y ojos color miel de mi misma fila. Era a la única que podía ver sin tener que girarme descaradamente.
La clase se me hizo corta y en cierto modo divertida. Ver como un chico de la última fila pronunciaba los verbos puestos en la pizarra torpemente, era muy gracioso.
Cuando iba a colocar mi trabajo encima de la mesa de la profesora, vi el de Erik, el cual hablaba de mí.

Tema: Re: Mi nueva no vida Lun Ago 18, 2008 6:01 pm

Woo, me gusta!!
Se hace corto, postea más cuando puedas Wink

Tema: Re: Mi nueva no vida Mar Ago 19, 2008 1:38 am

Y como la describirá, como una cabezota?? Twisted Evil

Me pregunto si cuando esté con el novio se acordará de Erik...

Kisses from hell

Tema: Re: Mi nueva no vida Jue Ago 21, 2008 4:53 pm

Gracias a las dos por comentar! ^^

Aqui os dejo otro trozo, que aunque no es para lanzar cohetes, cada vez falta menos para animarse la cosa Twisted Evil

Intente mirar que ponía, pero la vista fija de la señorita Dolç me intimidó, y no tuve más remedio que dejarlo y salir de clase cuando sonó el timbre.
Mélody y yo volvimos andando juntas a casa, ya que estaban bastante cerca la una de la otra.
-Melisa, Rocsan y yo hemos dicho de ir esta tarde de compras ¿vienes? –me preguntó con una gran sonrisa. Se mostraba muy amable conmigo, pero yo ya tenía una cita pendiente y estaba segura que sería mejor que una tarde de compras.
-Lo siento, pero ya tengo planes...
-Oh! Vale...-parecía decepcionada. Quizá fui demasiado precipitada al rectificar, pero quería encajar bien, y que me invitaran era muy importante para mí.
-Puedo ir con Lucas un rato, auque nos marcharemos pronto.
Su cara volvió a iluminarse y después de una despedida mutua me desvié de su camino para regresar a casa.
En cuanto abrí la puerta mi corazón se aceleró, en frente de mí estaba Lucas, mi Lucas, tan guapo y feliz como siempre, de brazos abiertos para recibirme. Era maravilloso.
Quise hablarle, decirle lo mucho que le echaba de menos, pero lo único que fui capaz fue de ir corriendo a su encuentro y besarle. Él me correspondió de buena gana y los dos nos quedamos mirándonos a los ojos, diciéndonos todo y nada con aquella mirada.
-Ejem... –en cuanto escuché a mi padre a nuestro lado me separé de Lucas con brusquedad, aunque enseguida apoyé mi cabeza en su hombro, necesitaba sentir su contacto. Le había echado mucho de menos. –La comida esta lista.-añadió echándonos una mirada de advertencia.
Me reí para mis adentros, tímidamente.
-Echaba de menos esa risita. –su voz... suspiré y me culpé por haber estado tanto tiempo alejada de él y más aun por haber pesado en algún momento que no me hacía falta.
Me dio un fugaz beso y fuimos a la mesa a comer, mis padres ya estaban sentados.
-¿Y cómo es que has venido tan rápido? –pregunté en mitad de la comida, los silencios producidos en ella me estaban poniendo nerviosa. Mi familia, y por supuesto mi padre, nunca habían soportado a Lucas, según ellos, no encajaba en nuestro mundo.
-O claro... aún no te he dado la nueva noticia. –su respuesta me dejó atolondrada. –Me he comprado un coche nuevo, uno de mucha más potencia, se llega mucho más rápido.
-¿Y qué haces que aún no me lo as enseñado?
Me levanté de la silla como si esta tuviera pinchos, eufórica. Me encantaban los coches veloces y ahora que Lucas tenía uno, sabía que era perfecto para mí. Tenía todo lo que yo quería: ese punto chulo y popular que me volvía loca, su patético sentido que tan solo me hacía reír a mí y su personalidad que encajaba perfectamente con la mía.
Su BMW era impresionante, de color negro y llantas plateadas alucinantes, aunque tenía varios rallazos.
-¿Y esto?-le pregunté señalando las marcas.
-De segunda mano, una ganga.
Asentí sin palabra, sabía que tarde o temprano tendría que darle la mala noticia de que la tarde había cambiado considerablemente, así que prefería decírselo ahora que estábamos solos, aunque estaba casi segura de que mi padre me estaría vigilando por la ventana de la cocina.
-Lucas...
-¿Si?
-Siento pedirte esto pero... ¿te importaría ir esta tarde de compras conmigo y mis amigas?
Su cara de desagrado no me pasó desapercibida. Sabía que en general, lo chicos odiaban ir de compras con la novia, y él por desgracia, era uno de ellos.
-Se que no te apetece, pero es la primera vez que me invitan y quiero adaptarme.-le insistí. Me hacía mucha ilusión estar con él y también me apetecía (aunque menos) ir con mis nuevas compañeras y con Melisa al centro comercial. –Nos iremos pronto, prometido.-añadí para arreglarlo un poco.
-Lo que sea por tí. –sus ojos verdes se encogieron y su sonrisa volvió a aparecer. –Entremos en tu casa, noto la mirada de tu padre en la nuca y me pone nervioso.
-No haber aparcado en frente de casa. –le contesté picarona.
-Quiero presumir de coche delante del suegro.
Reí. A pesar de todo este tiempo, las palabras novio, suegro, fidelidad y amor se me hacían extrañas. Incluso me costaba hacerme a la idea de que yo, una chica que intentaba pasar desapercibida estaba con el chico más deseado de Estrecolt.
Iba a entrar nuevamente en casa cuando noté el aliento de Lucas en mi oreja.
-Iré donde tu vallas, con tal de hacerte feliz.
Asentí sonrojándome, no podía creerme cuanto me gustaba escuchar todas aquellas palabras cursis. No añadí más y entramos nuevamente en casa para terminar de comer.
Acabamos muy tarde, por lo que subí corriendo a mi habitación, me cambié el horrible uniforme por una camisa azul y unos vaqueros y regresé con Lucas.

P.D: Pasatelo bien Anne_Cullen en las vacaciones!! =D

Tema: Re: Mi nueva no vida Sáb Ago 30, 2008 4:31 pm

Pobre Lucas, que a bajado a ver a su novia con una intención bien diferente y le toca pringar de tiendas... XD

Kisses xxx

Tema: Re: Mi nueva no vida Sáb Ago 30, 2008 5:43 pm

Gracias Netzara por seguir leyendo y comentando =P

Mis padres parecieron quedarse algo más tranquilos cuando desaparecí en el BMW de camino al centro comercial. Sabían que mientras estuviera con más personas y lejos de casa no haríamos nada que ellos consideraran indebido.
El viaje en el coche estuvo plagado de silencios, no eran incómodos, pero aún así me preocupaba que no tuviéramos nada que decirnos después de tanto tiempo.
Cuando por fin encontramos sitio para aparcar, bajamos del coche y nos dirigimos hacia el grupo de Melisa que nos esperaba en la otra acera.
-Hola.-les dije de forma cariñosa a las tres que miraban a Lucas con sonrisa bobalicona. Sabía que era muy guapo, y que a primera vista impresionaba bastante, pero después de la bellaza que había presenciado en Erik no le veía tan atractivo como siempre, aunque le seguía queriendo como el primer día. –Este es Lucas, ¿no os importa que venga, verdad?
-En absoluto. –me contestó Melisa mientras se adelantaba para saludar a mi novio. –Encantada, soy Melisa.
Mélody y Rocsan imitaron a esta, y acto seguido entramos en el gran edificio.

Yo ya había estado en varias ocasiones allí, pero en ninguna de ellas me lo pasé tan bien como ese día. Me di cuenta que no conocía ni la mitad de tiendas de las que había y que era mucho mejor ir de compras acompañada que sola o con mi madre. Lucas estuvo un poco apartado de todo el asunto, simplemente nos seguía, escuchaba nuestras conversaciones sin participar en ellas y me sonreía cada vez que le enseñaba algo que me acababa de probar, aunque sabía perfectamente que su sonrisa era falsa.
Tan solo hicimos una pequeña parada para tomarnos un refresco. A pesar de que el verano ya había pasado, en Silpront todo el año relucía el sol y el calor era sofocante, incluso en pleno invierno.
-¿Y cómo os conocisteis?- preguntó de repente Mélody, la cual no paraba de inspeccionar a Lucas.
-Le tiré un granizado por encima para que se fijara en mí.-contestó Lucas estirando los brazos, airoso de si mismo.
Mélody comenzó a reírse de una forma un tanto extraña, sonaba como un ataque de pulmonía.
-Seguro que ella ya se había fijado antes en tí, eres muy guapo.
Arqueé una ceja mientras buscaba las miradas comprensivas de Melisa y Rocsan, que asintieron al unisolo mientras posaban de nuevo su atención en Lucas y Mélody.
-Bueno, en realidad ella no me prestó mucha atención. Simplemente se enfadó conmigo por haberle estropeado su camiseta nueva y...
-Es imposible enfadarse contigo teniendo esos ojos verdes.
Anonadada, abrí la boca de par en par. No podía creerme que estuviera ligando con mi novio delante mío.
-Si, bueno...- Lucas dejó de mirarla para hacerme señas a mí.
Miré enseguida el reloj, como me indicaba con la mirada.
-¡Valla! ¡Que tarde que se nos ha hecho, creo que deberíamos irnos!
Me apresuré a despedirme de mis dos compañeras y de Melisa antes de que Mélody le pidiera una cita formal en mis narices.

Subimos de nuevo al BMW y esta vez mantuvimos una divertida conversación, donde los descaros por parte de Mélody ocuparon la mayoría del trayecto.
-No creo que sea una amiga muy fiable, no quisiera que te hiciese daño o algo por el estilo, ya me entiendes. – concluyó cuando aparcamos en frente de casa.
-En realidad hace poco que la conozco, no se podría considerar “amiga”.
Lucas asintió mientras se desabrochaba el cinturón y se giraba para mirarme intensamente.
Era extraño sentir las miles de mariposas que en ese momento recorrían mi estómago, no importaba que nuestra relación estuviera distanciada, nos seguíamos queriendo igual Me ruboricé y bajé la cabeza.
-¿Quieres que vayamos a mi cuarto?- las palabras salieron torpes, pero comprensibles.
-No.
Le miré extrañada, nunca antes se me había negado.
-¿Ocurre algo?
-No pasa nada... simplemente es que tus padres ya han vuelto a casa.
Giré la cabeza y vi el coche de mi madre aparcado justo detrás nuestro ¿Cómo no lo había visto antes?
- Oh! Lo siento mucho Lucas, yo no sabía que iban a tardar...
Me silenció con un beso un tanto frío.
-No importa, en realidad, será mejor así, sin pasar tiempo a solas.
Mi estómago dio un vuelco. No sabía como interpretar esas palabras.
-Veras...- se pasó la mano por la cabeza, eligiendo escrupulosamente las palabras adecuadas, aunque no lo fueron. –Quería despedirme de tí de una manera especial.
Noté como su mano se aferraba a la mía, mientras mis ojos empezaban a derramar lágrimas y mi voz se volvía aguda.
-¿Cómo?-pude articular entre sollozos.
-Estamos distanciados... apenas nos vemos, nuestra relación hace tiempo que no funciona y yo ya no siento lo mismo que antes. –escuché el crujido de mi corazón al hacerse mil añicos. –Además.-añadió.-he conocido a una muchacha estupenda, y me gustaría empezar con ella como es debido.
Mi cabeza no podía asimilar tanta información. Esta mañana me estaba susurrando palabras de amor al oído y ahora me decía que le gustaba otra chica.
-¿Y lo de esta mañana?
-Tan solo intentaba no mostrarme demasiado duro contigo. –Sin duda, esas palabras terminaron de hundirme.- Solo quería...ya sabes. Despedirme de tí con un recuerdo agradable.
-¿Pensabas hacer el amor conmigo y después dejarme tirada como una colilla? –mi voz sonó aguda y dolorida, y tanto que lo estaba. Esta vez mis dotes como actriz no sirvieron de nada.
-Hombre dicho así suena un poco mal. Piensa que tus padres me han hecho rectificar y que he preferido decirte primero esto.
-¿Y si mis padres no hubieran llegado a tiempo?

Tema: Re: Mi nueva no vida Sáb Ago 30, 2008 6:49 pm

Pobre Vic... Esperemos que no le pase como a Bella. Aunque claro, está Erik por ahí Rolling Eyes

Y qué fuerte lo de Mélody. Ahí en la misma cara de todas. Aunque seguro que Lucas se estaba diviertiendo lo suyo.

Más cuando puedas!

Tema: Re: Mi nueva no vida Sáb Ago 30, 2008 8:50 pm

Sera cabron!! Eso se dice antes... y Melody ni es amiga ni es nada

Continualo cuando puedas n_n

Tema: Re: Mi nueva no vida Dom Ago 31, 2008 1:22 am

Melody, una pedazo de lagarta.

Y él es un cabrón, hijo de la gran P.... que ojala y se estrelle con el coche de camino a casa. Uff!!! que me acelero un montón, pq no me conoces, pero te aseguro que acabas de poner un trozo de mi vida, tal cual.

Espero que se dé cuenta de que el tipo le ha hecho un favor, y que dejarla es lo mejor que le podía haber pasado, pq ahora puede encontrar a alguien que sea realmente bueno para ella.

Y despues de deshogarme un poco,, te pido que pongas un trozo más.

Kisses from Hell XXX

Tema: Re: Mi nueva no vida Lun Sep 01, 2008 3:55 pm

Gracias a las 3 chicas =D por seguir comentando!
Ya se que esta parte os ha alterado un poco a las 3 (por supuesto a ti Netzara XD) pero esto lo hago para que no sea una historia con protagonistas perfectos y ropturas amistosas y eso. Quiero que parezca de verdad, y supongo que esto ocurre en ciertos casos =P

Bueno, sin enrollarme más os dejo un poquito más =D

-¿Y si mis padres no hubieran llegado a tiempo?
Lucas no contestó, simplemente alzó un poco la vista para no mirarme directamente a los ojos.
-¡Estúpido!-bramé ofendida.- no quiero volver a verte en la vida ¿me oyes? ¡Nunca!
Salí del coche disparada, apenas veía lo que pisaba a causa de la capa de lágrimas que envolvían mis ojos. Pero aún así, pude llegar a mi casa sin ningún accidente.
-¿Vic?
Escuché la voz de mi madre desde la cocina, pero la ignoré, simplemente subí atropelladamente las escaleras y me dirigí a mi habitación.
Me desplomé en mi cama mientras escuchaba el latir de mi corazón roto.

CAPITULO 4

Pasé tres días así, en la cama de mi habitación, sin salir apenas de ella. Tan solo bajaba al piso inferior para comer (si a eso se le podía llamar comer) y para asearme. Todo lo que había a mi alrededor era oscuridad, dolor, tinieblas... sentía una fuerza invisible que me oprimía el pecho y me hacía pensar en lo desgraciada que era. Dejé de llorar al segundo día, cuando mis lágrimas se habían agotado y ya no podían morir más por mí. Fue horrible sentir esa pena y no poder manifestarla. Fue horrible sentirse tan vacía e insignificante en la vida. Fue horrible saber que ya no le importabas al ser al que quieres...

-Cariño... –mi madre sufría conmigo al verme así, pero no me sentía con ganas como para fingir que estaba bien. -¿Por qué no sales hoy con Melisa? Es sábado... seguro que va a algún sitio.
Era la hora de comer, y mi padre se había quedado a comer en el trabajo, por lo que estábamos solas.
-Mamá no tengo ganas...- mi voz sonó triste y apagada.
-Por favor... seguro que te lo pasas genial, ya lo verás.
-Tan solo quiero estar sola un par de días más.
Su mano se posó en mi pelo y me acarició tiernamente.
-Has faltado varios días al instituto, si sigues así solo conseguirás ir demasiado retrasada. Deberías despejarte un rato.
Me encogí de hombros, sabía que tenía razón. Siempre la tenía.
-Esta bien.
Mi madre sonrió, me dio un beso en la coronilla y siguió comiendo.

Cuando habíamos acabado me apresuré a llamar a Melisa, la cual me dijo la hora y el lugar donde habían quedado ella, Mélody y Rocsan. Parecía muy entusiasmada de que por fin diera señales de vida.

Cuando faltaban apenas veinte minutos para encontrarme con mis compañeras y mi amiga, salí de casa. Llegaría pronto, pero prefería tener tiempo para ir pensando por el camino la excusa de mi ausencia durante esos tres días. No quería decirles mi ruptura con Lucas, y lo mal que me había sentido por ello.

Al final no tuve que esperar mucho, por lo que mi respuesta sonó un tanto improvisada cuando me preguntaron por qué no cogía ninguna llamaba ni acudía a clase.
-Estaba enferma y no me gusta que nadie escuche mi voz cuando estoy constipada...- me miraron con cara extraña.- manías.-añadí utilizando todas mis técnicas de actriz.
Acabaron por creérselo.
Entramos al primer pub que encontramos por la zona, y aunque no había mucha gente el ambiente era agradable y reconfortante a pesar de su falta de limpieza.
Nos sentamos en unos taburetes rojos en frente de la barra y pedimos algunas bebidas con sonrisa bobalicona. Estaba claro que aun no teníamos ala edad de beber, pero por la cara que puso el camarero, mientras hubiese dinero, habría alcohol.
A pesar de que normalmente no bebía nada, había tomado la decisión de olvidar las penas, y no se me ocurría otra cosa mejor, u otra cosa más rápida.
A mi tercer cubata, ya empecé a notar algún síntoma, pero no paré.
-Vic... ¿no estas tomando demasiado? –me preguntó Rocsan mirándome fijamente.
-No... –mi voz sonaba un poco carraspeada.- bueno... quizá si, pero no pasa nada, estoy bien.

En el próximo trozo... ya irá ocurriendo lo interesante Twisted Evil

Tema: Re: Mi nueva no vida Mar Sep 02, 2008 12:26 am

Tu has hablado con mi madre y te ha contado un trozo de mi vida, verdad?

Emborracharte es lo peor, o te da por llorar, o te acabas liando con quien no toca.... a mi me da por llorar si estoy tristona, y por gritar si soy feliz... nunca se sabe, es como una ruleta rusa para mis amigas.

Sabes, yo no le diría nada a Melody de la ruptura, es capaz de ir a buscarlo... pobrecita, igual no es mala chica, y lo hizo sin darse cuenta, hay gente así.

Mañana más? No me dejes co la promesa de algo interesante mucho tiempo, please.

Kisses XXX

Tema: Re: Mi nueva no vida Mar Sep 02, 2008 4:35 pm

La pobre Vic, el mal trago que la está haciendo pasar ese impresentable.
Estoy con Netzara en que no lo diga demasiado alto en presencia de Melody, o al final va a ser ella esa otra.

Más pronto, por favor. Wink

Tema: Re: Mi nueva no vida Mar Sep 02, 2008 5:19 pm

Gracias de nuevo por comentar!! =D Voy a ser buena y a haceros caso!! =P asi que os dejo un trozo más! =D
que lo disfrutéis.

Rocsan no pareció quedarse muy convencida, pero aun así no insistió en aquel tema, si no que lo cambió por completo.
-¿Has hablado ya con Erik de mí?
Hice un gesto pensativo, mientras me llevaba a los labios el cuarto cubata.
-No ha surgido el tema. – Intenté callarme, pero tenía la lengua un tanto suelta esa noche.- La verdad es que tan solo he hablado con él para fastidiarle un poco. No me gusta la forma en que me trata, como si tuviera cinco años menos que él, se cree superior. Alguien que puede tratar a las personas a su antojo, como si fuesen juguetes inútiles, viejos y rotos y que tan solo les preocupa cuidar su nuevo BMW y tener a una chica lo suficientemente cerca para no gastar gasolina.
Al terminar, yo misma me había dado cuenta que había dejado de hablar de Erik unas frases atrás.
Rocsan me miró estupefacta mientras Melisa y Mélody estaban en su conversación sobre el examen de inglés sorpresa que les pusieron el otro día (suerte que yo no estuviese).
-Por lo menos hablas con él. Eres la primera persona de todo el instituto, que no sea de su familia claro, que habla con él.
-¿Su familia?-pregunté mientras le hacia un gesto al camarero para que me sirviera otro cubata.
-Si...- miró el vaso que acababa de posar en la barra con preocupación. – El director Joks es su padre adoptivo –“eso ya lo había deducido por el apellido” pensé mientras una risotada se me escapaba.- la señorita Dolç es la pareja estable del director y los otros dos son los hermanos de Erik, Catherine y Josh. Van a un curso más que nosotras.
No le contesté. No tenía más que decirle, pero ella insistió en el tema.
-¿Por qué a ti? –me preguntó. –Quiero decir... ¿por qué tan solo tú tienes el valor de mirarle a los ojos y contestarle?
Me encogí de hombros, no sabía a donde quería llegar. Era cierto que me costaba no perderme en su mirada grisácea, pero...
-Supongo que es por la forma en que me trata. – miré el vaso nuevamente vacío. Pedí otro con una seña y una sonrisa bobalicona, ya no sabía lo que estaba haciendo. – Si fuera el típico seductor nato, que con cada palabra te hace derretir... supongo que si me costaría hablarle. – era la segunda vez que hablaba de Lucas, y eso me hizo derrumbarme más de lo que ya estaba. –Pero no lo es. –añadí.
-Bueno tampoco lo conoces mucho.
Asentí con la cabeza gacha, era verdad. Al fin y al cabo tan solo lo había conocido hace unos días, y hablado con él mucho menos... pero la sensación que producía en mí cuando estaba a su lado... a parte de fascinación y aturdimiento, era de nerviosismo e inquietud, incluso rabia. Me ponía inquieta el estar con él en una misma aula, e incluso por un dichoso mote me ponía histérica y me costaba mucho contenerme para no chillarle en la cara. Era muy extraño el torrente de emociones negativas que me envolvían cuando estaba con él. Yo... una persona que no solía enfadarme por nada.
Al principio no le di importancia al hecho, pero el exceso de alcohol me hacía recordar momentos pasados, mientras que iba olvidando el presente...
Pero ¿por qué recordar a él? Intenté pronunciar su nombre... pero una furia interior me recorrió la espina dorsal ¿qué me ocurría?
-¡Vic! – Rocsan me estaba sacudiendo cuando volví a la realidad. Mélody y Melisa habían posado la vista en mí dejando su tema a parte. -¿Te encuentras bien?
-Perfectamente.- mentí, pero mi voz sonaba rara, incluso me costaba mucho reaccionar o acordarme de lo que acababa de hacer. -¡Ponme otra! –le grité al camarero señalando el vaso nuevamente vacío. Este me miró inseguro, pero mientras pagase...
-Creo que deberíamos irnos.- me dijo Melisa cogiéndome del brazo.
-¡No!-le grité apartándome de ella bruscamente. -¡Marchaos vosotras! ¡Yo ya iré luego!
-No estas en condiciones de ir a ningún sitio sola. - me informó Mélody intentando cogerme.
Miré el vaso con desesperación.
-Esta bien, dejadme que acabe este.- les dije con una sonrisa bobalicona.
Ellas aceptaron, pero no me quitaron el ojo de encima.
Después de terminar, pagué amablemente al camarera y nos fuimos.
Me di cuenta de que debía sujetarme a Rocsan y Melisa para poder caminar.
El camino a casa se me hizo corto y divertido, ya que pequeñas risotadas salían desprendidas de mi boca.
-Adiós.-me dijeron las tres a la vez cuando me dejaron con cuidado en la puerta de mi casa.
Hicieron mal.
En cuanto giraron la esquina volví a alzarme por las calles. No podía entrar en casa a aquellas horas y así. Tendría que despejarme un tanto.
Todas las risas de antes fueron sustituidas por retorcijones de tripa y angustias... sentía la comida de tres días atrás en la garganta.
Lo eché todo en una papelera al lado de un parque. Por la noche, en las calles de Silpront no había nadie. La mayoría estaban en discotecas, pubs o simplemente se quedaban en casa.
La cabeza me daba vueltas y ni siquiera veía por donde iba. Mi vista me jugaba malas pasadas, nublándome todo a mí alrededor, era horrible.

Cuando quise darme cuenta me había metido en un callejón sin salida.
¡Sería estúpida! Ahora tendría que volver a salir de aquel oscuro y largo lugar, con lo que me costaba mantenerme en pie.

De repente, antes de que pudiera suspirar, algo se me echó encima, algo realmente pesado y... frío.
Empecé a patalear, nerviosa, desesperada. Pero mi cuerpo a penas se movía unos centímetros debajo de aquel cuerpo helado.
Miré a mí alrededor, pero tan solo veía sombras. Las náuseas volvieron, pero esta vez provocadas por el miedo, el pánico y... ¿el odio?
Si... hay estaba otra vez, ese odio latente. Pero ¿por qué?

Aquel ser me agarró la mano, y retorciéndome la muñeca de una manera muy dolorosa, me mordió.

A partir de ahí, mi vista se nubló por completo, mis sentidos se apagaron... no sentía absolutamente nada. Las náuseas habían desaparecido, el dolor de cabeza, el miedo, el odio... todo.
Lo único que podía hacer era escuchar los leves latidos de mi corazón... cada vez más lentos, más insonoros, más muertos...
La pesadilla que tanto tiempo atrás me desvelaba de mis profundos sueños, se cumplió.

P.D: Mucha gente me llama cruel a partir de este punto de la historia. Yo en mi defensa digo que lo dejo un poco interesante para que enganche =P

Tema: Re: Mi nueva no vida Mar Sep 02, 2008 5:27 pm

¿Sólo te llaman cruel? Por Dios, estas cosas no se dejan así. En cuanto puedas un cachito más, por muy corto que sea Wink

Tema: Re: Mi nueva no vida Miér Sep 03, 2008 1:30 am

Estoy con Edhelgrim, eso no se hace Evil or Very Mad

Además ya estabamos enganchadas... claro que ahora te estaremos dando la brasa hasta que cuelgues más.

Kisses XXX

Tema: Re: Mi nueva no vida Miér Sep 03, 2008 5:07 pm

Gracias de nuevo a las dos!! =D

No seré mala y os dejaré hoy otro trocito... Wink

No se que me sacó de aquella paz, pero fue horrible. Por un momento pensé que había muerto y que me hallaba en el infierno.
Cada músculo, cada hueso, cada célula de mi cuerpo se retorcían provocándome un dolor inhumano. Sentía que la piel me ardía como si me estuviera quemando en ese momento con fuego, los huesos se alargaban o encogían a su gusto y mi estómago se comprimía y se hacía mucho más pequeño.
La sangre hervía convirtiéndose en vapor, desapareciendo de mis venas y sustituyéndose por ácido puro.
No supe cuanto tiempo estuve en ese estado, para mi fueron meses, incluso años.
Quería morir, o si ya lo había hecho, quería ir al cielo, si es que existía. Deseaba que todo acabara de una vez, pero por mucho que chillé, pataleé y lloré, el dolor no dejó de manifestarse en mi ser.

Así estuve, hasta que un día, el dolor cesó de repente. Como quien tiene abierto un grifo durante mucho tiempo, mientras el agua cae y cae y de pronto, sin más, lo cierran sin dejar que una gota más se derrame.

Abrí lentamente los ojos, pestañeando bien, tranquilamente. Nunca me había sentido mejor en toda mi vida.
En cuanto estuve despejada miré a mí alrededor, era muy temprano. Seguramente el sol estaría apareciendo ahora por el horizonte. Aún así, asombrosamente, mi vista podía ver con claridad la estancia.
Mi estómago dio un vuelco.
¿Dónde estaba?
Me hallaba en una habitación redonda, tumbada en un sofá de cuero negro. Me extrañó no haberme pegado a su piel a causa del sudor provocado por el dolor, para mi sorpresa, no había rastro de humedad alguna en el sofá.
Miré atentamente la estancia. Las paredes parecían forradas de terciopelo rojo, un par de estanterías con la forma redondeada de la cargaban decenas de libros con portadas muy atrayentes. Un escritorio y una silla negra ocupaban la mayoría del espacio disponible.
En cima de este, tan solo un tintero, una pluma y un pergamino enrollado se posaban en la excelente madera negra.

Estaba desconcertada, por un momento pensé que aún seguía soñando. Pero supe que no era así cuando alguien llamó a la puerta con delicadeza, pero aún así autoritariamente.

Miré hacia todos los lugares, buscando una vía de salida.
Tan solo un ventanal me la podía dar. Miré a través de ella, pero enseguida rechacé la opción de tirarme desde esa altura. No era mucha, pero no saldría de allí sin un par de huesos rotos, lo que me impediría echar a correr.
-¿Se puede? – me giré de inmediato al ver que la puerta se abría con cautela. Fue extraño no sentir el corazón latiéndome a mil por hora en esa situación.
Un muchacho de considerable altura, con el pelo alborotado color castaño claro me saludó con una sonrisa perfecta.
-Hola peque.
“No...” fue lo único que pensé en ese momento.
¿Me había secuestrado? ¿Por qué no recordaba nada de cómo había llegado hasta este lugar? Pero...exactamente ¿Dónde estaba? Todo el dolor pasado estos días, la pérdida de memoria, todo... ¿sería a causa del alcohol? Todo mi sufrimiento... ¿había sido tan solo una resaca?
-¿No me reconoces?- Erik avanzaba hacia mí tan majestuoso como siempre, con esa mirada gris que me hipnotizaba. –Soy yo... tu compañero de latín y matemáticas, al cual no prestaste un libro que necesitaba después de ser tan considerado contigo, el cual...
-¿No deja de incordiarme?- mi voz sonaba ofendida y... diferente. Como más armoniosa, más dulce y relajada. A parte, el odio que a veces sentía cuando me acercaba a él había desaparecido.
-Veo que te acuerdas de mí entonces.

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